Esto está causado fundamentalmente por dos factores:
- La redistribución de los lugares de trabajo a espacios fuera de la oficina y el incremento en el uso de plataformas virtuales de colaboración ha ampliado sustancialmente la superficie de exposición y ataque. Esto puede amenazar la infraestructura digital de la que ahora dependemos más que nunca para dar continuidad al negocio. Puede incluso amenazar la infraestructura crítica y el suministro de servicios críticos si no se gestiona de forma proactiva.
- La crisis del COVID-19 proporciona a los atacantes nuevas oportunidades de realizar ataques específicos, como pueden ser ataques mediante correos de phishing o de fraude dirigido. Estas tácticas tienen como objetivo aprovecharse de los ciudadanos que están lógicamente preocupados por su salud y protección en un momento en el que pueden ser especialmente vulnerables.
En definitiva, el primer paso empieza en nosotros mismos: mantente alerta para permanecer a salvo y seguro.
Para ello, sigue estos 8 consejos sobre ciberseguridad durante el periodo de teletrabajo:
1. Lleva a casa únicamente los dispositivos e información que sea absolutamente imprescindible
La mejor manera de proteger la información o los dispositivos frente a pérdida es en primer lugar, no sacarlos de su entorno corporativo habitual. De esta forma, se evita el riesgo de pérdida en el trayecto o en casa.
Asegúrate por tanto de que solo llevas a casa los dispositivos e información que realmente necesitas.
2. Protege tu red doméstica y utiliza conexiones seguras
Dado que vas a estar usando tu red privada doméstica, debes protegerla de forma adecuada con un cifrado WiFi robusto y una contraseña única y compleja, así como manteniendo las correspondientes actualizaciones.
Trabaja siempre a través de una conexión segura, estableciendo si es necesario una conexión VPN (URA), especialmente si estás transmitiendo información sensible o estás accediendo a la red corporativa interna.
3. Mantén actualizado el software de todos tus dispositivos
Cuando trabajas desde casa, tus dispositivos personales y los dispositivos corporativos están usando la misma red doméstica. El tráfico de datos pasa a través del mismo router al que están conectados otros dispositivos domésticos inteligentes que, en el peor de los casos, podrían no tener una protección actualizada.
Todo ello puede ser un punto de entrada para los intrusos, por lo que se recomienda que permitas que todos los dispositivos conectados a tu red doméstica, tanto corporativos como personales, se actualicen automáticamente.
4. Apaga la función de control por voz en dispositivos domésticos inteligentes, y cubre la webcam cuando no la estés usando
Los asistentes de voz escuchan lo que se dice en la habitación y lo envían al proveedor correspondiente. La posibilidad de que esas grabaciones terminen cayendo en malas manos no debe descartarse.
Por tanto, ese tipo de dispositivos no deberían estar presentes en habitaciones en las que se discutan asuntos importantes o confidenciales o al menos deberían estar apagados.
Y asegúrate de cubrir la webcam de tu PC cuando no la estas usando, así como de tener cuidado de lo que se comparte cuando está activa.
5. No mezcles el uso personal y corporativo de los dispositivos
Haz una clara distinción entre dispositivos e información dedicados a negocio y los del ámbito personal.
No transfieras datos del ámbito de trabajo a los dispositivos personales. Esto evitará cualquier fuga accidental de información.
Como efecto secundario, ayuda también a la separación psicológica entre el tiempo "de trabajo" y el tiempo "personal".
6. Cierra la sesión cuando dejes de usar los dispositivos y guárdalos de forma segura
Incluso cuando estés haciendo un breve descanso, bloquea la pantalla de tu PC y del móvil, tal y como harías en la oficina, para que no queden accesibles durante tu ausencia.
Y, por supuesto, es necesario seguir protegiendo en todo momento los dispositivos frente a un acceso no autorizado o incluso robo también mientras están en casa, fuera de la oficina.
7. Identifica proactivamente a todos los participantes en las reuniones en línea
Las herramientas de videoconferencia son un excelente sustituto de las reuniones presenciales. Al mismo tiempo, sin embargo, puede ser más difícil verificar si todos los que aparecen conectados han sido realmente invitados.
Puede ser relativamente sencillo que personas no autorizadas que hubieran obtenido el número de teléfono y código de conferencia se conecten a reuniones con un alto número de participantes.
Por este motivo es recomendable que cualquiera conectado a un conferencia se identifique brevemente, así como comprobar si hay algún asistente no identificado, especialmente si se discuten asuntos sensibles o al mostrar la pantalla en modo de presentación.
8. Se extremadamente cauto con correos sospechosos o ficheros adjuntos, especialmente si no conoces al emisor
Especialmente en el entorno doméstico y durante el teletrabajo, es necesario mantenerse alerta frente a correos maliciosos.
Se han realizado estudios que muestran que la probabilidad de caer víctima de este tipo de ataques maliciosos es más alta cuando se trabaja desde casa.
Adicionalmente, no caigas en la trampa de precipitarte al recibir emails que requieren alguna acción extraña urgente o con noticias no contrastadas sobre la actual crisis del COVID-19. Dedica un tiempo prudencial a revisar en detalle estos emails antes de hacer clic en cualquier enlace o abrir cualquier adjunto.